Donald Trump: Presidente electo y su política interna y externa.
El mundo siguió con atención las elecciones presidenciales en Estados Unidos, que como siempre y sin nadie quererlo afectan de una u otra forma a todos. La victoria del expresidente Donald Trump, sobre su rival demócrata Kamala Harris, fue contundente, en unas elecciones limpias y tranquilas muy distintas a las de hace 4 años. Creo que en el fondo el pueblo americano deseaba que así fueran para recuperar la confianza en el sistema electoral que se vio muy afectado por las infundadas manipulaciones del sector mas de derecha del país encabezados por el propio exmandatario, que no acepto los resultados y llevaron al país al caos del 6 de enero del 2021 con el asalto al Capitolio por unos miles de descerebrados, seguidores de Trump. Pero ya aquello es historia pasada y lo que interna y externamente interesa ahora es que Políticas internas y externas seguirá Trump, aunque ya sabemos algunas muy importantes que redefinirán la sociedad del país y las relaciones internacionales, por haberlas estado anunciando durante su campana electoral. Hay preocupación sin lugar a duda en todas partes comenzando por los millones de indocumentados que viven en el país y que temen que les esta llegando la hora de ser deportados a raíz de la decisión de Trump de llevar a cabo la mayor deportación en la historia de los Estados Unidos. Sera este un proceso difícil y aunque complicado de llevarlo a cabo por razones practicas y de presupuesto, lo cierto es que al menos todos aquellos que ya tienen orden de deportación, unos 1.3 millones serán la prioridad y saben que no tienen ninguna otra oportunidad de quedarse en el país. Seguirán otras categorías de inmigrantes ilegales, sobre todo aquellos que entraron en los últimos años que según cifras de la agencia de protección de fronteras asciende a mas de 5 millones de personas que se aprovecharon del caos y la desorganización en la frontera sur del país, debido a una mala política migratoria y la poca mano dura de la administración actual en este tema. Pagarán justos por pecadores y familias se verán separadas. La inmigración ilegal siempre ha sido un tema delicado para los presidentes y como cada uno tiene su propia idea de como tratarla es muy difícil que de una vez se establezcan las reglas en este tema más allá de partidos. Entre otros temas internos que veremos cambios drásticos es en lo económico con la intención de Trump de desregularizar la economía, bajar los impuestos no tanto a los ciudadanos normales sino a las grandes corporaciones que se beneficiaran mucho con las nuevas reglas que seguro se aprobaran por un Senado y un Congreso controlados por el Partido Republicano. Sectores claves como la energía, la educación y la salud igual verán cambios, nada mas viendo a los propuestos para encabezar estos ministerios, personas leales al presidente electo y con historiales de ser negacionistas en cuanto al cambio climático, las vacunaciones masivas, etc. En cuanto a política exterior, muchos creen que el mundo no será mas seguro, pero otros creen que sí, sin embargo, todos coinciden que cambiara la forma en que Estados Unidos ejercerá su diplomacia, menos sofisticada y mas dura, similar a la que ya nos mostro Trump en su primera presidencia. Hay temas internacionales muy candentes hoy en día. La guerra en el medio oriente entre el aliado Israel y sus vecinos árabes se ha ido complicando un año después que comenzara tras el asalto y asesinato de más de 1500 israelíes por los terroristas de Hamas y mas recientemente por los combates en el norte del país contra los terroristas de Hezbola, la otra organización criminal creada y financiada por Irán el gran enemigo de Israel en el medio oriente y de Estados Unidos. Trump aquí no puede hacer alardes y tomar decisiones según su temperamento del momento, estamos hablando de una posible confrontación directa entre los mencionados rivales y por ende una extensión muy peligrosa del conflicto que repercutirá en la paz mundial, pues a parte de USA, potencias como Rusia y Norcorea apoyan al régimen iraní abiertamente y aunque menos evidente, pero sí que lo hacen los Chinos también. Todos estos mismos contendientes están presentes en la otra guerra que ya lleva casi dos años y que tiene a Europa una vez mas al borde de un conflicto global entre Rusia, invasora de un país soberano como Ucrania y los países occidentales que apoyan a esta última, junto con Estados Unidos. Donald Trump ha prometido acabar con esta guerra en un día, comentario típico de una persona que lanza sus opiniones sin sopesar las consecuencias de sus palabras y sin muchas veces con la lógica y el sentido común necesarios. Por mucho que quiera esta guerra no podrá acabarse solo porque el futuro presidente quiere, pues el tema de fondo es muy complicado comenzando por el papel de la OTAN en esta y los desacuerdos existentes entre los miembros de esta que serán mas evidentes en cuanto Trump jure como presidente. Para nadie es un secreto que por diferentes motivos, a Trump no le es tan antipático el Presidente Ruso, Vladimir Putin y creo que en el fondo lo apoya en algunas cuestiones relacionadas con esta guerra y por ello, Ucrania sabe que le quedan a penas 2 meses para lograr avances en el frente de batalla pues de lo contrario el flujo financiero y militar que ha estado recibiendo dela administración de Joe Biden, se acabara o disminuirá considerablemente, mermando así su capacidad para mantener la contención del avance ruso en el este del país, que poco a poco y a pesar de las grandes perdidas se va consolidando. Europa occidental necesita el apoyo de Estados Unidos para frenar la amenaza rusa, así que, si se cumplen las amenazas de Trump de limitar el apoyo, si estos países no aumentan su nivel de gasto militar, no será fácil para Ucrania ganar esta guerra y tendrá que en algún momento que sentarse a negociar con su agresor una paz que ya comenzará sobre la base de territorios perdidos y anexados a Rusia. Es decir, el tiempo corre a favor de los rusos, que siendo un país inmensamente mayor que Ucrania, con un ejercito inmensamente superior en números de soldados y armamentos, puede sostener una guerra por mas tiempo que la propia Ucrania aun con el apoyo de la OTAN, que no ha sido tampoco total. Otros temas candentes para considerar son la lucha de poderes globales entre USA y China, la amenaza del régimen de Norcorea, con sus misiles balísticos intercontinentales que han estado desarrollando con el apoyo de China, Rusia e Irán. También a considerar las alianzas que se han ido forjando entre algunos de esos regímenes con países latinoamericanos izquierdistas como Cuba, Venezuela, Nicaragua, que en conjunto han sido los ejecutores de las emigraciones masivas coordinadas entre ellos para crear el caos en la frontera sur de Estados Unidos con la actitud permisiva de México. Estos países son el núcleo de la desestabilización de América Latina, financiando cualquier causa que ellos consideren afectan al vecino del norte, incluso vaciando sus cárceles de asesinos de grupos delictivos que azotan a la región e infiltrándolos ilegalmente en Estados Unidos. El mundo ha cambiado mucho desde el primer mandato de Trump y si bien ya este mundo sabe como es y como maneja sus políticas, no es menos cierto de que los conflictos de hoy son más serios y difíciles de resolver que antes. El temperamental electo presidente con un apoyo casi sin fisuras dentro del partido que lo sustenta, así como en ambas cámaras del congreso querrá aprovechar tal poder para hacer cumplir sus promesas y aquí el pueblo americano lo juzgara y dictara su sentencia si el legado fue positivo para el país o no. Tiene el poder para hacer del mundo un lugar mejor o no y tiene el poder para mejorar la vida del ciudadano común dentro del país, que ha puesto sus esperanzas en él.
Por: Francisco Perello Dorticos